Mundo ficciónIniciar sesiónVex Mordaine había sido acusado de muchas cosas durante doscientos años. Brutalidad. Manipulación. Ambición sin límite. Pero nunca—nunca—de traicionar a aquellos bajo su protección.
Y sin embargo, mientras miraba el rostro de Seraphine mientras Zara colapsaba, vio duda. Solo una fracción de segundo. Pero fue suficiente para sentirse como una daga en el pecho.
Ella había cuestionado, aunque sea brevemente, si él podría haber hecho esto.
La furia que explotó en él no tenía nada que ver con el honor herido. Era más primitiva que eso. Era el rugido de un lobo cuya compañera dudaba de su lealtad.
Ella es mía, pensó salvajemente. Mía. Y nunca, nunca la habría traicionado.
Pero incluso mientras ese pensamiento resonaba en su mente, otra verdad lo seguía: no le había dado razones para confiar. No cuando todavía guardaba tantos secretos. No cuando nunca le había dicho las palabras que importaban.
Marcus sostenía el cuerpo de Zara co







