C130-VINE POR TI.
C130-VINE POR TI.
A la mañana siguiente de su cita fallida, Lucy cerró la puerta de su departamento, caminaba por la acera con paso tranquilo, pero al llegar a la esquina sintió algo.
Como una presión silenciosa en la nuca… como si alguien la estuviera mirando.
Se detuvo y miró detrás de ella.
No habia nadie. Solo el ruido normal de la ciudad y una pareja cruzando la calle.
—Estás loca —murmuró para sí, intentando reír—. Paranoica y loca.
Y siguió caminando, aunque el escalofrío le duró hasta que dobló la siguiente cuadra.
Esa misma noche, las luces del escenario iluminaron a las niñas mientras ejecutaban su coreografía con precisión. Era su primera presentación como instructora y Lucy, en el fondo, las guiaba con movimientos fluidos, cada paso, cada giro, era perfecto.
Y en la última fila, casi en penumbra, un hombre observaba.
Eros no parpadeaba.
Su mirada seguía cada curva de Lucy—el arco de su pie en las puntas, la tensión de sus muslos bajo el leotardo negro, el brillo de sus lab