Rafael se había tomado un momento para estar a solas, no le gustaban las fiestas y estaba un poco engentado. había tantos invitados por todos lados.

El CEO fumaba un cigarrillo en el balcón de la segunda planta, en el mismo que antes había estado Emiliano intentando controlar sus emociones.

Está vez unos tacones se escucharon acercarse a él. La mirada verde esmeralda se levantó para ver de quién se trataba. El gemelo apenas podía creer que fuera ella.

La bella gemela a medida que avanzaba se veía tan hermosa, su vestido en transparencias y corset adornado con pedrería fina, ondeaba con el viento.

— Rafael... ¿Qué haces aquí?

— Diane... ¿Qué haces tu aquí? Además, ¿Cómo sabes quién de los dos gemelos soy?

— Una siempre sabe quienes son las personas que... Recordamos desde siempre, pero dime, ¿Cómo sabes tú quien soy? Podría ser Angela.

— Bueno no solamente puedo saber que eres Daiannpor ese lugar apenas perceptibles que tienes en tu mejilla, si no porque lo sé.

—