La pasión de un hombre Ivanov.
Una vez en el restaurante, Sofía observaba cada detalle, era elegante, y muy exclusivo, apenas llegaron el CEO fue quien habló
— Buenas noches, ¿Tienen reservación?
— No, no tenemos, pero quiero una mesa a nombre del CEO Donovan Ivanov.
— Oh, claro, adelante señor Ivanov, le daremos una de nuestras mejores mesas. — El joven hostess pronto los guió a una mesa con vista a unos hermosos jardínes.
— Que linda vista tiene está mesa. — Sofi no podía dejar de mirar las flores de afuera.
— Que bien que te guste, te dije que el restaurante iba a ser de tu agrado.
— Es hermoso, CEO Ivanov, le agradezco mucho la invitación, no debió haberse molestado.
— ¿Quién dijo que era molestia? Además ya no me parece que me hables de usted, simplemente llámame Donovan.
— ¿Qué? No puedo hacer eso, mi hermano me asesina, pensará que me estoy aprovechando de usted.
— Nadie se aprovecha de mi si yo no lo quiero. Ahora revisa la carta, pide lo que quieras, quiero que esta noche sea esp