El sarcasmo de Rubí.
-¿Dónde putas tienes a mi hijo? Gritó Noah cuando la mujer contestó; él estaba como loco, sabía que su hijo corría peligro al estar en manos de dos locos, ya era mas que evidente que ninguno de los dos estaba psicologicamente bien.
-Hola hijo, porque te guste o no eres mi hijo, ¿Cuál hijo, de qué me hablas, no sé de que hablas, no me digas que soy abuelita? Respondió ella con total sarcasmo.
-Maldita sea Rubí, sé que por dinero te vendes, a ver dime ¿Cuánto te ha pagado Massimo Forte, sé que esto viene de parte de ese desquiciado, entra en razón por favor si te queda algo de humanidad, yo te duplico la cantidad, pide lo que sea, pero devuélveme a mi hijo.
-¿Tu hijo? Creo que estás mal hijo mío, porque Massimo tiene un hijo con tu adorada Emma, no tu el niño creo que está con él, por qué piensas que yo tengo a ese disque niño tuyo, vamos Noah, dime, no pensé que tú fueras tan débil, jamás pensé que hubiese algo en la vida aparte de tu padre, por quien tú te desesperaras de esta manera