La noche fue un poco tortuosa, mas para Dante que para Zaira, él había perdido a la mujer de su vida por decisiones tomadas y no había nada más que hacer, ella le había dejado las cosas bastante claras, Emiliano era un buen hombre, no sabía mucho de su vida privada, pero por lo que sabía, él era el hombre perfecto para Zaira.

Un hombre que había tenido una vida bastante complicada en el plano amoroso, así que le daría a Zaira todo lo que él no podía darle.

Zaira por otro lado, se relajó más de la cuenta, había cerrado el capítulo con Dante, el hablar con Emiliano le había ayudado a entender un poco todo lo que estaba sucediendo en sus sentimientos.

La mañana siguiente, Zaira se vistió con un mezclilla, una camisa blanca y tenis del mismo color, amarró su cabello en una coleta alta, nada de maquillaje, la mujer se veía hermosa al natural, tenía un brillo especial en su rostro ese día, se había liberado de un peso bastante grande, había liberado a Dante de su alma.

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