GEMMA Y OLIVIA HERMANAS.
Alguien tocó la puerta de la oficina en donde estaban Dante y Zaira desnudos.
-Dante, sé que estás ahí, por favor, necesito que hablemos, es importante, dijo una voz conocida detrás de la puerta.
-Es Olivia Renoir, no tengo idea que puede querer esa mujer hablar conmigo tan importante.
-Me vestiré para que hables con ella.
-Claro que no, no dejaré que te vayas y mucho menos por esta loca.
-Dante por favor, si hace tanto que no hablan el estar aquí a esta hora, debe ser por algo importante, estaré en la oficina de al lado, dijo la chica tomando su vestido del piso de la oficina.
A Dante no le quedó más que atender a la chica, él rápidamente se vistió y desde su escritorio abrió la puerta de la oficina, como tenía acceso solamente Susana y Zaira aparte de Dante, nadie más podía ingresar.
-¿Qué haces aquí, que quieres? Preguntó el hombre bastante serio.
-Es algo muy importante para mí, de no ser así no estaría a esta hora tocando la puerta de tu oficina implorando que abrieras, cuando se