No tenía caso perseguir a ninguno de los dos, ahora más que nunca necesitaba respuestas, llamó repetidas veces a Tomas pero este no respondió, alise la había dejado encargada del establecimiento, pero ella no sabía que hacer allí, buscó a Piero por el lugar sin encontrarlo, estaba anocheciendo y el lugar comenzaba a llenarse, le marcó nuevamente a tomas dejándole un mensaje en el buzón.
- ¿Estas segura de que era el mismo hombre?
- No tengo duda de ello.
- Venga Dayla pero eso no tiene sentido, espera un mensaje de Alise– miró la pantalla del teléfono – pregunta que donde estoy ¿no sabía que estaba aquí contigo?
- No, todo pasó muy rápido.
- Otro mensaje – mira absorto el teléfono – en pocas palabras que venga aquí a relevarte que ella esta con Tomas arreglando un asunto familiar.
Ambos se miraron en silencio
- Verás Tomas tiene un hermano…
- Escuché de el – le interrumpió ella – asunto complicado – volvieron a guardar silencio – ¿crees que estarás bien? estoy un poco agotada, me gus