Cuando le decía esto y le sonreía, observándola con ternura y abrazándola, se sentía derretir y se animaba a considerar que el mundo le devolvía un poco de luz.
Mientras estuvo en el hospital, recuperándose de dos costillas rotas, cortes y abrasiones distintas, recibió visitas inesperadas que la pusieron nerviosa y que les fueron reafirmando que Kaleb iba en serio.
En principio Regina y Violet, ambas contritas y super amables, explicándoles lo preocupadas que habían estado, lo mucho que Kaleb había sufrido y el alivio que toda la familia sentía al ver que estaba bien y que había sido rescatada.
—Me complace pensar que Kelly´s Delicatessen proveerá de manera ilimitada a nuestra casa ahora —, le dijo Regina riendo y ella no pudo más que devolver la sonrisa.
—Sin dudas, considerando que fue la fiesta de tu niña la que hizo que Kaleb recalara en mi local y que nos conociéramos—añadió con timidez.
—Eso es maravilloso—aplaudió Regina—. Aunque le debes también un agradecimiento a Sharon, que