"Hay algo que debes saber"

Las palabras seguían flotando en el aire a la espera de ser completadas.

Regina lo miró, con curiosidad y cautela. Sabía que era un hombre astuto que siempre tramaba algo, pero esta vez no estaba dispuesta a dejarse enredar en sus engaños.

—Los Stirling —comenzó Nicolás respirando hondo, como si el tema que fuera a empezar a continuación le pesara profundamente. No tenía ni la menor idea de qué podría causar semejante reacción—, tu abuelo y tu padre… ellos no solo estafaron a mi familia. Los arruinaron. Y luego… los mandaron a desaparecer.

La revelación fue un balde de agua fría.

¿De qué estaba hablando?

¿Qué historia se había inventado esta vez?

No pudo evitar fruncir el ceño, con una risa incrédula picándole en la garganta, al parecer estaba colocando a trabajar velozmente su cerebro para inventarse alguna estupidez. Lástima que esta vez no le iba a creer nada.

—¿De qué estás hablando, Nicolás? —preguntó con calma, sin alterarse. Completamente segura