Mundo ficciónIniciar sesiónDentro de la casa del abuelo Tom, Adeline no pudo contener su curiosidad.
Sus ojos se posaron en la puerta cerrada — la habitación de Jason.
La llave seguía colgando del picaporte.
Dudó un momento… y luego giró la llave suavemente.
Click.
La puerta se abrió.
Adeline entró y, de inmediato, una avalancha de recuerdos la envolvió.
Pósters, libros, trofeos y decenas de fotografías colgando en las paredes.
Cada rincón gritaba el nombre de Jason… pero uno mucho más joven.







