17. Ti amo
Su mundo se había detenido con aquella mirada que Gian le estaba dando, a penas podía contener la eufórica emoción que la abordaba.
—De lo que siento por ti, Gattina. Eso no ha cambiado, nada lo ha hecho, lo cierto es que se han intensificado —Gian continuó hablando con la voz enronquecida y letalmente suave necesitando que ella conociera tu corazón de una vez por todas—. Obviamente no lo notaste,
porque todos los chicos de la escuela te seguían a donde quiera que fueses, incluso aunque yo fuera el mejor amigo de tu hermana, apenas nos veíamos de cerca, pero de lejos yo te admiraba Gattina, te admiro, no solo por lo terriblemente hermosa que eres sino también por tu corazón dulce, quizás ninguno podía ver más allá de esa hermosa cara y tu estilo perfecto pero yo sí podía verte, ver la manera que siempre ayudas a todo a tu alrededor, amo cada parte de ti que te hace única, lo valiente que eres, no te has rendido y eso hace que me sienta orgulloso de que seas la madre de mis hijos porqu