Oliver observó a Victoria con una mezcla de sorpresa y precaución. Sabía que Victoria era una mujer decidida y no se detendría hasta obtener respuestas.
—Victoria…
—No me mientas Oliver, se que César y Olivia tuvieron algo en el pasado, solo un tonto no se daría cuenta de eso. Pero, quiero que me digas si César aun siente algo por ella.
Oliver guardó silencio. Parecía que la vida volvía a ponerlo en esta situación, donde dependía de él el que Victoria siguiera confiando en su hermano. Y realmente si fuera el Oliver del pasado, aquel que solo tomaba las cosas que quería, podría incluso haber sido cómplice del asesinato de César, pero no era así.
Entendió que en el amor también se valía perder y ver feliz a la persona que era importante para él, aunque no fuera a su lado.
—César te ama, Victoria. —Sus palabras salieron convincentes y articuló una pequeña sonrisa.
Victoria percibía que estaba haciendo mal al acudir con Oliver para preguntarle sus dudas, y más avergonzada estaba al estar