La voz de Oliver se entrecortaba al hablar, y César podía sentir el nudo en su garganta mientras escuchaba las palabras de su hermano. La incertidumbre y el temor se mezclaban en su mente mientras intentaba procesar la noticia.
—En la morgue del hospital regional. Estoy en camino hacia allá. Te enviaré la ubicación. César, lo siento mucho.
César apenas logró murmurar un agradecimiento antes de colgar y mirar a su familia con una expresión sombría.
No podía decirle a nadie lo que estaba sucediendo, al menos no hasta que confirmara si se trababa de Victoria. Desvió la mirada hacia Ethan, quien lo observaba con una expresión curiosa.
César trató de forzar una sonrisa para tranquilizar a Ethan, pero su mente estaba abrumada por la incertidumbre y la preocupación. Decidió actuar con calma para no alarmar al niño.
—Ethan, tengo que ir a un lugar importante. ¿Te importaría quedarte con tu abuela por un momento mientras regreso?
Ethan asintió, aparentemente sin sospechar nada, y se levantó de