Una dulce esposa para el Mafioso. Capítulo 11. Siempre lograban lastimarla.
— Señora por favor baje, su familia está aquí. — Anunció Clarisa al tocar la puerta y un escalofrío recorrió a Mia.
Había estado esperando que ocurriese un milagro y ellas no aparecieran, pero no había sido tan afortunada, nunca lo era, así que debía enfrentarse a ellas.
— Dame un momento, ya bajo. — Dijo Mia con voz temblorosa, no quería tener que enfrentarlas, ellas siempre lograban lastimarla, pero está vez no temía por ella, si no por lo que iban a pedir que hiciera, por lo que querían obligarla a hacer.
— Si señora. — Dijo Clarisa y se fue.
Mia se levantó llena de abatimiento y desgana, pero sin más opción salió de la habitación y comenzó a bajar las escaleras, sintiendo cierto malestar en su estómago al mirarlas.
— Mia te ves realmente bien. — Espetó Olivia al mirarla y aunque quería que esto fuera mentira, era verdad, Mia en este tiempo había conseguido ganar un poco de peso y eso la hacía ver más hermosa, porque anteriormente por culpa del maltrato de ellos estaba demasia