Yo confío en ti.
Clan Sangre y Fuego
El castillo
Isan caminaba de un lado a otro, mientras Betzabet se limitaba a mirarlo, conteniendo todo aquello que tenía para decir pero que estaba a punto de salir de su boca.
La mirada del rey estaba entre confundida y furica.
Últimamente sus emociones podían cambiar de un segundo a otro, cosa que hacía intolerante el estar con él.
- Esa desgraciada, como pudo atreverse a entrar a mis tierras.
- Isan, estás paranoico, es imposible que sea Abigail.
- Ja, crees que la confundiría fácilmente? La conozco mejor que nadie, era ella.
- Cómo puedes estar tan seguro?
- Sus ojos, fueron esos malditos ojos.
- Estás loco de verdad.
El rey se acercó, casi que de forma mágica a la bruja, tan cerca que sus labios podían rosarse, pero no de la forma romántica que la bruja hubiera querido.
Las manos del rey fueron directo a su cuello, no apretó su cuello de una vez, si no que lo hizo de una forma lenta, sus ojos brillaban en un rojo carmesí, Betzabet lo mi