Capítulo 29. La mejor noche de su vida.
Capítulo 29. La mejor noche de su vida.
Rosa no vino a recoger a sus hermanos en toda la noche. Así que tuve que darles de cenar y los instalé en mi antiguo dormitorio.
Lucien no dijo nada, es más, lo mismo ni se enteró. Cuando él llegó a la cama, yo debía de estar dormida porque no me enteré de nada. Sé que durmió aquí porque su lado de la cama estaba deshecho, pero nada más, porque cuando me desperté esta mañana, él ya no estaba en la habitación.
Cuando fui a buscar a los niños ya estaban levantados, y lo primero que hicieron fue preguntar por su hermana. No sabía qué decir, así que dije lo primero que se me ocurrió: que tenía mucho trabajo y que yo me haría cargo de ellos.
Así que mi mañana fue una maratón: desayuno exprés, correr a su casa a coger los uniformes y llevarlos al colegio. Al menos no tuve tiempo para pensar en nada más.
A media mañana, cuando por fin tuve un respiro y me disponía a poner una lavadora, ya sabía que si Lucien o la bruja del mar me pillaban estaría