Capítulo 162. Aunque me cueste la vida
En cuanto Irina advirtió a Olga que tenía que hablar con Richard de forma urgente, ella sabía que debía encontrar la manera de salir de casa de Marco sin ser vista.
Y no le fue difícil.
Marco quería estar junto a Bianca y le indicó ir a la casa a descansar.
Olga dijo al servicio estar cansada y se retiró temprano a su dormitorio.
La seguridad en la casa de Marco era extensa, para entrar, pero no se esperaban que debieran cuidar también de que alguien saliera.
Olga salió muy fácil de la propiedad, usando una ventana de su habitación, tomó un taxi y se dirigió al lugar de encuentro.
Casi era medianoche, el aire estaba denso y bastante tranquilo. Richard apagó el motor del coche, pero no bajó de inmediato. Olga estaba llegando.
La observó con el abrigo cerrado hasta el cuello. Corrió los últimos pasos y subió a su lado.
— ¿Qué es lo que pasa? Escuché a Irina muy nerviosa.
— ¿No te dijo que ocurría?
—No, no tenía tiempo, estaba cerca de Marco.
Richard desv