Ethan empujó la puerta con suavidad, cuidando de que no chirriara. La luz tenue de la lámpara de noche bañaba la habitación con un resplandor cálido. Jessy estaba sentada en la cama sin poder dormir, el bebé dormía en su cuna, y en un sillón cercano la enfermera cabeceaba, vencida por el cansancio.
—Mamá… —susurró Ethan mientras cerraba la puerta tras de sí.
Jessy levantó la cabeza de golpe, con los ojos aún cansados.
—Ethan… ¿qué ocurre? No te Vi en toda la noche. Me dejaste cenando sola...estaba tan asustada.
Él caminó rápido hasta la cama y le tomó las manos.
—Estoy bien. Tenemos que irnos ahora mismo. Peter está preparando todo. No hay tiempo, mamá.
Jessy palideció.
—Irnos? ¿Cómo? Hay guardias por todas partes. Si nos atrapan... y ese hombre...
Ethan bajó la voz aún más, hablándole casi al oído.
—Uno de los amigos de Marcus está afuera. Se llama García. Parece que Spectre ya hackeó el sistema de vigilancia, y Peter se quedará distrayendo a Víctor. Solo tenemos que movernos cuando