Cap 78. La búsqueda
—¿Alguien la ha visto? —pregunta el príncipe con el ceño fruncido, caminando de un lado a otro en el centro del patio universitario.
—Ni rastro —responde uno de sus amigos, sacudiendo la cabeza mientras mira en dirección a la cafetería.
—¿Y preguntaron en la biblioteca?
—Ya lo hicimos. En todos los pasillos, en los jardines, hasta en los baños femeninos... bueno, no entramos, pero lo intentamos. Nadie sabe quién es.
—Esto es ridículo —gruñe el príncipe, con exasperación.
Esa mañana, en cuanto llega a la universidad, lo primero que hace es salir a buscarla. Desde el encuentro con la pelirroja el día anterior, su mente no ha conocido descanso. Tiene que saber quién es. Cómo se llama. Por qué lo ha rechazado con tanta firmeza y seguridad. Nadie lo había hecho anteriormente. Nadie lo miraba así. Y eso, precisamente, es lo que más lo tiene obsesionado.
Para su sorpresa, y creciente desesperación, nadie parece conocerla. Ni los profesores, ni los estudiantes de años superiores, ni siquiera