Capítulo 229.
El impacto del evento que muchos periodistas querían cubrir era sorprendente. Pese a tratarse de una tradición anual, resultaba asombroso cómo algo que en un inicio surgió como una serie de solicitudes enviadas a amigos cercanos por parte de Sara, ahora la colocaba en la posición de decidir cuidadosamente a quiénes podía aceptar.
La lista de asistentes superaba las expectativas, y su equipo de organización tuvo que rechazar a medios internacionales, figuras públicas influyentes e incluso a miembros del mismo grupo de socios que, por protocolo o desacuerdos anteriores, no podían formar parte.
Los jardines del edificio fueron preparados desde días antes. Las mesas decoradas con detalles minuciosos, los músicos ensayando sus piezas que deleitaban los oídos de todos, y las medidas de seguridad duplicadas ante la certeza de que no se trataba solo de una subasta, sino de una exposición sutil del poder que los Crown sostenían. Porque habían sido los primeros en auspiciar una subasta de perso