Capítulo 49. Entrenamiento de fuego
Capítulo 49. Entrenamiento de fuego.
Pov Clara:
Hay cosas que una nunca se imagina que se va a vivir. Yo, por ejemplo, jamás me vi a mí misma como un soplete humano. Pero aquí estoy: con las manos ardiendo, a punto de convertir un inocente arbusto en mi primera víctima oficial. Si esto no es progreso, no sé qué es.
El campo detrás del castillo parece una pista improvisada de entrenamiento: tierra seca, piedras feas y unas cuantas matas que me miran como si supieran que van a morir chamuscadas. Yo también lo siento: hoy alguien se va a llevar una quemadura. Solo espero que no sea yo.
—Relájate, Clara —dice Erika, con su tono zen de siempre. Ella habla como si controlar un incendio fuera tan fácil como servirse un vaso de agua. Se cruza de brazos, erguida, como una entrenadora profesional.
Yo la miro con sarcasmo. —Claro, “relájate”, dice la que no tiene fuego saliéndole de las orejas.
Luz se acerca y me toma de las manos. Sus dedos fríos me hacen temblar, como si metiera las man