Gabriel

Esta semana las cosas han empezado a ir de mal a peor.

Como si el hecho de que la mujer que me traicionó haya regresado comprometida con mi hermano y con el futuro de mi empresa en sus manos, no fuera suficiente, ahora tengo a mi madre llamándome y escribiendo todo el día mensajes pasivo-agresivos desde que me largué de su supuesta cena.

Pero eso no es todo, ya ha empezado con las amenazas directas. "Si no arreglas este desastre, me veré obligada a tomar decisiones que no te gustarán". Por supuesto, se refiere a la presidencia de la empresa. Ya lo ha hecho antes. No sería la primera vez que intenta manipularme con eso.

Y Ema… aaa Ema está muy cerca de conocer lo peor de mí, en especial cuando tuvo la osadía de armarme un escándalo. Dijo que la expuse, que la dejé en ridículo delante de mi familia. Que por mi culpa la prensa está comenzando a especular sobre el futuro de nuestra supuesta relación.

No la escuché. Ni la miré. Solo me fui. No tenía energía para lidiar con una men