~ Punto de vista de Damien ~
¿Su madre?
¿Ha desaparecido?
El pensamiento me atravesó el pecho, agudo y acusador. Sentí que mi expresión se tensaba, mi mirada fija en la delicada piel de su cuello.
"¿Por eso salió?", murmuré en voz baja, con un sabor amargo en la lengua.
Antes le había dicho que no podía irse. La detuve. Se lo prohibí.
Maldita sea.
Una punzada de frustración me invadió, ardiente y fría a la vez. Apreté los puños. Si me hubiera escuchado... si se hubiera quedado atrás como le ordené... esto no habría pasado. No estaría allí tirada sufriendo. No estaría temblando cada vez que intentaba respirar.
Pero me desobedeció. Me desobedeció rotundamente, sin dudarlo, sin miedo. Dentro de mí, la ira luchaba con algo más, algo desconocido e inoportuno. Preocupación. Me carcomía, recorriendo mi columna vertebral como agua helada.
No me gustaba.
Por su aspecto, esa zona necesitaba atención, su cuello, estaba rojo, clamando por alivio. No debería verse tan frágil. No se suponía que tuv