Alade*
El silencio tras la propuesta de Miradiel era tan espeso como la neblina que envolvía el valle al amanecer. Alade no conseguía apartar la mirada de él. Sus palabras todavía martilleaban en su mente, cortando como láminas de hielo.
"Estás callada hace mucho tiempo..." murmuró él, con una media sonrisa, sombría y enigmática. "Aparentemente, te sorprendí."
Ella respiró hondo, intentando mantener la postura.
"Aún lo necesitamos."
"Podemos encontrar el punto de encuentro con Colen solos." Miradiel entrelazó los dedos sobre el brazo de la silla, los ojos clavados en ella. "Va a tardar... pero podemos."
"No tenemos tiempo. Mi hogar está en riesgo. Las personas que amo. Él puede llevarnos hasta Colen antes que cualquiera."
"Lo defiendes con bastante vehemencia, Alade Veraz."
"Ya dije que lo necesitamos."
"Sigues repitiendo eso, pero no suena a verdad." Su mirada se volvió aún más sombría. "Tienes su olor."
El cuerpo de ella se tensó. Él lo notó.
"A menos que él te haya forzado... parec