Capítulo 479
Mateo asintió. Sí, no volvería a dudar.

Debía salvar a Luciana, costara lo que costase.

Mateo miró a Valentina:

—Valentina, será mejor que trates la enfermedad cardíaca de Luciana. No quiero obligarte.

El corazón de Valentina cayó hasta el fondo. Mateo realmente se había puesto del lado de Luciana y esos asesinos.

Valentina sonrió con frialdad:

—Señor Figueroa, si quieres obligarme, ¡primero veremos si tienes esa capacidad!

Marcela dijo:

—Valentina, qué arrogante eres. Aunque seas la doctora milagro de la medicina nacional, no puedes enfrentarte a un magnate como el señor Figueroa. Con solo mover un dedo, el señor Figueroa tiene mil maneras de hacerte caer en desgracia.

Catalina añadió:

—Valentina, ya te hemos dado una salida. Acéptala ahora. Romper relaciones no te beneficiará. Te aconsejo esto sinceramente por tu bien.

Luciana intervino:

—Valentina, si no piensas en ti misma, al menos piensa en el señor Balcázar. ¿Realmente permitirás que el señor Balcázar pierda la vida por ti?

Vale
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App