CAPÍTULO 127. Elena ha desaparecido.
Capítulo 127
Elena ha desaparecido.
Gabriel e Isabela estaban inclinados sobre la mesa del penthouse, las fotos desplegadas como piezas de un puzzle que todavía no permitía ver la figura completa. La luz fría del lugar rebotaba en las laminas satinadas; cada imagen devolvía un fragmento de horror: Elena con la piel primero pálida, luego marcada; la etiqueta numérica en el brazo; las cicatrices ordenadas; los símbolos garabateados en paredes que parecían más que simples grafitis. El silencio que ocupaba la sala no era vacío, pesaba.
Teresa, al otro lado de la ciudad en la casa segura, mantenía la mano de Elena con firmeza, como si sujetando su pulso pudiera atar los recuerdos dispersos. Elena miraba el techo con ojos huecos y, de cuando en cuando, dejaba escapar un sollozo contenido que se perdía en la habitación.
Silvio, instalado en el cuarto de servidores del penthouse, hablaba por el auricular con voz tensa mientras repasaba las comprobaciones de integridad. Necesitaban que cada