*—Callum:
Al decidir que iban a quedarse con el bebé, Clayton se sintió feliz y lleno de vigor, pensando positivamente de que iban a llegar al final de este proceso bien y tenía mucha fe.
—Veamos cómo está todo por dentro —murmuró Giovanni, poniéndose de pie mientras señalaba con un gesto hacia la zona de evaluación al fondo del consultorio.
Callum se levantó lentamente, sintiendo el corazón latir con fuerza en el pecho. Caminó hacia la camilla con pasos inseguros, como si cada movimiento fuera parte de un ritual sagrado. Se colocó con cuidado la bata de hospital que Giovanni había preparado, sintiendo la tela fría contra su piel. Luego, permitió que Dominick y Edward pasaran al interior.
Dominick se acercó enseguida y lo ayudó a recostarse en la camilla con una delicadeza que conmovió a Callum. Sus manos, firmes pero amorosas, lo acomodaron con reverencia, como si fuera algo frágil, valioso. No apartó los ojos de su rostro ni por un segundo, transmitiéndole con su mirada todo el apoy