Capítulo 79 —Mugrientita
Narrador:
Eros seguía cocinando con el torso desnudo, descalzo, el cabello aún algo alborotado, y esa concentración suya que lo hacía ver peligroso y delicioso a la vez. Sasha, envuelta en su camiseta, se acomodó en la encimera frente a él, balanceando las piernas mientras lo observaba con una sonrisa traviesa. De pronto, la mirada de Eros se desvió hacia la mesa y frunció el ceño al ver la pistola sobre la superficie. Se acercó, la tomó con seguridad, verificó que el seguro estuviera puesto y la guardó de nuevo en el cajón. Todo con ese gesto serio, rápido y natural que delataba que tenía tiempo de entrenamiento. Sasha se mordió el labio inferior, sin quitarle los ojos de encima.
—Te veías tan sexy con esa pistola en la mano —dijo en voz baja, inclinándose apenas hacia adelante —Si no fuera por el susto que tenía, casi tengo un orgasmo solo de verte.
Eros la miró por encima del hombro, y soltó una carcajada profunda y espontánea, de esas que pocas veces se le