Jamás volveré a fijarme en ti.
La voz golpeada del Alfa diciéndole que después de haberla echado de la manada se volvía a poner frente a él, dejó a Esmeralda en shock, ese no era el lobo que había tratado durante años, este lobo era aterrador.
— Leonardo... Pensé que te daría gusto saber que me había curado de mi enfermedad, que no iba a morir.
— Bien por ti, pero cuando te envié al mundo humano, fué para que tú y tu familia se alejaran de la manada Luna De Plata. Aunque un poco tarde pero entendí que tú solamente dañabas la imagen de la luna de la manada, desafortunadamente con mi ayuda.
— ¿Por qué dices eso? Yo nunca enfrenté a Alejandra. Ella siempre estaba en sus asuntos. No tenía el carácter para venir a mí y reclamarme por estar tan cerca de ti.
Las palabras de la beta, hacían rabiar más al Alfa. Cuánto daño le había hecho a su pareja destinada, era por eso que no quería volver a verlo, era por eso que huyó y no pensaba regresar jamás.
— Ese fué un grave error de mi parte, acudir a tus llamados