TODOS LOS BESOS DE TU BOCA. CAPÍTULO 46. Silencio en la noche
TODOS LOS BESOS DE TU BOCA. CAPÍTULO 46. Silencio en la noche
La tarde había caído con una luz dorada y tranquila sobre la casa. El jardín olía a hierba recién cortada y a café recién hecho. Dentro, la familia se había reunido para pasar el día con Ethan. Rebecca y Henry, agotados después de varias noches sin dormir, se habían dejado convencer de que descansaran un rato.
Curtis sostenía a su nieto con una torpeza entrañable, como si cargara algo demasiado valioso para tocarlo. Ethan se movía un poco, arrugando la nariz, y el viejo soltó una risa que contagió a todos.
—Parece mentira que se necesiten tantos adultos para cuidar a una sola criatura tan chiquita —bromeó, meciendo al bebé con movimientos torpes.
—Y eso que solo lo cargas, no cambias pañales —le respondió Seija entre risas, cruzándose de brazos.
—Ah, no, a mí déjenme en la parte linda —dijo Curtis, guiñando un ojo.
Rebecca sonrió desde el sofá, con los ojos medio cerrados. Le pesaban los párpados, pero no quería perderse aq