EL PRIMER BESO… DESPUÉS DEL DIVORCIO. CAPÍTULO 30. Sin vuelta de hoja
EL PRIMER BESO… DESPUÉS DEL DIVORCIO. CAPÍTULO 30. Sin vuelta de hoja
Julie Ann seguía de pie, tambaleante, con las mejillas encendidas por los golpes de Chelsea y los ojos llenos de lágrimas. Parecía que apenas podía sostenerse, y su voz era casi un murmullo desesperado mientras miraba a henry a los ojos y le soltaba la última frase magistral.
—No me cabe en la cabeza cómo puedes ser tan cruel —siseó con angustia.
Pero él solo la miró con una mezcla de cansancio y desprecio. Había algo en su mirada que no era simple enojo, era como si la estuviera viendo de verdad por primera vez, con esos amargos y escatológicos detalles que antes no había visto o por alguna razón se había empeñado en ignorar.
—Siempre lo supiste —respondió con una calma amarga—. Y nunca te importó, mientras esa crueldad fuera con alguien más. ¿No es así?
Y Julie Ann no pudo responderle, solo encajar aquella frialdad letal en los ojos de Henry mientras este sacaba su teléfono sin apartar los ojos de ella. Sus dedos