Guiados por Liam, Aeric y Lyra se adentraron en un territorio desconocido, siguiendo las pistas que el joven licántropo recordaba vagamente de su cautiverio. El camino era tortuoso y peligroso, atravesando bosques sombríos y montañas escarpadas, lugares donde la Orden de la Sombra ejercía su influencia.

"Están cerca", dijo Liam, con la voz temblorosa. "Puedo sentir su presencia... un aura oscura y fría..."

Aeric y Lyra agudizaron sus sentidos, preparándose para cualquier eventualidad. Sabían que la Orden de la Sombra no les daría la bienvenida con los brazos abiertos.