Marlon Rhys, después de enseñar el departamento a su nueva asistente, se dirigía al encuentro del equipo de detectives asignado a la búsqueda de sus supuestos hijos robados. La voz del pequeño en su mente le martillaba: "¡Eres nuestro padre, sálvanos!"
Mientras se dirigía allí, recordaba el final de la entrevista con su nueva asistente, Ariana. ¿Así que había cometido pequeños delitos como hacker? Esas habilidades le serían de mucha utilidad. Sonrió al recordar su nerviosismo al confesarlo:—Señor, antes de iniciar oficialmente y firmar el contrato general, quería decirle que yo... he hecho algunos trabajos no tan honestos —habló estrujándose las manos, completamente sonrojada.—¿Qué quiere decir con eso? —le preguntó preocupado.—Por ejemplo, puedo buscarle todo lo que usted quiera