No seré una más de tus mujeres.
Después de permanecer abrazados durante un buen rato, el tercer Alfa se alejó para preguntar.
— Todavía no me has dicho tu nombre, ¿Cómo te llamas?
— Mi nombre es Loren, estudio el segundo año de arquitectura en la universidad, solo que justo cuando salí de clases, ese hombre me secuestró, dijo que le había gustado y que me convertiría en una de sus chicas. Yo me negué a estar con él, y fue por eso que me mantuvo prisionera.
Massimo estaba furioso, pero tenía que controlarse, su luna tenía que ver su mejor lado.
— De eso ya no te preocupes, los Moreti están muertos, esa mafia se ha terminado.
— ¿De verdad? Oh por dios, me siento tan aliviada. Ese hijo de puta por fin va a dar cuentas en el infierno.
Al Alfa le sorprendió que la frágil mujer no le tuviera miedo a la muerte.
— Si, te estoy diciendo la verdad. Escucha Loren, yo soy Massimo, Massimo Gambino, ¿Te suena?
— ¡No puede ser! Debes estar bromeando, ¡No puedes ser el menor de los hermanos Gambino, los mafiosos