C20- ATAQUE EN EL ESTACIONAMIENTO.
C20- ATAQUE EN EL ESTACIONAMIENTO.
Fue un beso ansioso, torpe y feroz a la vez, como si dos personas que se habían amado demasiado tiempo se encontraran al borde del abismo. Isabella respondió sin pensar, con rabia y deseo mezclados, aferrándose a su chaqueta, devolviéndole todo lo que había enterrado durante dos años.
Hasta que la realidad la golpeó y se apartó de golpe y le dio una bofetada que resonó en el estacionamiento.
—¡No! —escupió—. ¡Esto está mal!
Se dio la vuelta, dispuesta a irse, pero Aslan fue tras ella.
—Huyes —dijo, sin disculparse y sin suavizarlo—. Huyes porque sabes exactamente lo que sientes y te aterra.
—Déjame en paz, Aslan —respondió ella, sin mirarlo—. Ya hiciste suficiente.
Él insistió en acompañarla hasta su auto, pero Isabella protestó, cansada, herida y sobre todo decidida a no sentir nada más.
Y entonces, las luces parpadearon.
Tres figuras emergieron de las sombras, cerrándoles el paso. Hombres comunes a primera vista… hasta que sus ojos se volvieron co