Demasiado tarde para arrepentirse.

Dylan sabía que tenía que tomar medidas para alejar a Analía de su vida y proteger a su familia de la influencia tóxica de esta mujer. Con esto en mente manejó hacia su casa, encontrándose agotado después del partido de béisbol.

—Señora Marina me podría traer un vaso con agua, por favor— pidió Dylan con amabilidad y la señora jadeó impresionada puesto que él solo sabe pedir las cosas de manera arbitraria.

«Hasta sus modales han cambiado», pensó Marina de manera divertida, a pesar de no saber por qué no encontró a Judith al regreso de sus vacaciones que ella misma le había dado, supuso que se debe a ella el cambio que muestra Dylan.

No pasó mucho cuando el ama de llaves regresó con el agua.

—Gracias, — dijo mientras bebía un poco de agua, dejando una vez más a Marina con los ojos casi salidos de las cuencas.

Luego Marina lo miró con un poco de pena y comenzó a hablar:

—Señor Anderson, necesito decirle algo. Aunque realmente necesito este trabajo, ya no me siento cómoda trabajando para
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo