—Vaya, cuando me dijeron que era una chica novata de 18 años, crei que mi recibimiento sería diferente.
Levanto mi vista y me doy cuenta que era apuesto y que al menos tendrá unos 20 años.
—Que clase de recibimiento puede tener alguien que entra a mi casa sin autorización.
—Bueno, comúnmente, las chicas me reciben con nerviosismos y me atienden como un rey.
Me burlo de lo que dice —Los chicos como tú y él si que tienen el ego por los cielos no es asi. —suspiro— En fin. Supongo que no es a lo unico que has venido personalmente a hacer verdad. —Parpadea con sorpresa. —Termina lo que tengas que decir y vete que quiero descansar.
—Bueno…. Supongo que no lo notó. —frunzo el ceño —Me llamo Allen, y desde ahora soy y seré su fiel familiar.
Me quedo perpleja pero luego me río ya que es estupido lo que está diciendo, “¿Familiar?” Si claro. Así que le dije que dejara sus juegos y se fuera pero se niega a irse ya que según las leyes es hora que la Meiga vuelva a su aquelarre y yo debo a