Capítulo 92. El Latido Más Pequeño.
**Valentina**
El test tenía dos líneas, ¡dos líneas!
Lo dejé sobre el lavamanos como si quemara. Me senté en el borde de la tina del baño de nuestro apartamento en Medellín, y traté de respirar. Era temprano. Muy temprano. Alejandro dormía aún, con la cara enterrada en la almohada, sin saber que en cuestión de minutos, el mundo, nuestro mundo, iba a cambiar.
Me temblaban las manos. Mi pecho subía y bajaba con fuerza. No sabía si llorar, reír, salir corriendo o abrazar la posibilidad. Todo se me juntaba en el pecho: miedo, vértigo, esperanza, culpa, deseo.
Mamá. Pensé en mi mamá.
—¿Qué harías tú? —susurré al techo.
Ella ya no estaba. Pero yo sí. Yo estaba aquí. Viva. Amada. Y aparentemente… embarazada.
Salí del baño despacio, con el test escondido en la palma. Me arrodillé junto a la cama y lo observé dormir. Su respiración era tan tranquila. La forma en que sus pestañas tocaban la piel. Alejandro era fuerza y ternura. Y ahora, sería padre.
—Alejo… —le susurré, tocando suavemente su ho