Capítulo 132. Un Nuevo Latido.
**Alejandro**
La mañana había comenzado con la paz de los días simples. Estábamos en el atelier, Valentina dibujaba concentrada en una nueva línea de tejidos experimentales mientras Iris dormía la siesta en el cuarto de costura adaptado para ella. El sonido de la lluvia afuera me parecía un fondo perfecto para trabajar.
Entonces mi celular vibró.
Camilo.
Respondí con una sonrisa, pero no alcancé a decir “¿qué hay de nuevo?” porque su voz me interrumpió, temblando de emoción contenida:
—Hermano… voy a ser papá.
Silencio.
No porque no entendiera. Sino porque esas palabras golpearon con una dulzura que me hizo sentarme de golpe en el borde del escritorio.
—¿Qué? —repetí, como un idiota.
—Laura está embarazada, Alejo. ¡Vamos a tener un bebé!
Me reí. Me reí como no me reía desde hacía semanas, con la garganta abierta, el pecho liviano, el alma encendida.
—¡Carajo, Cami! ¡Qué noticia tan hermosa!
Valentina alzó la mirada desde su mesa. Me vio con esa expresión que decía: ¿Qué pasó?
—¡Valen!