Capítulo 49. Una plegaria mental...
La anciana se quedó en su lugar, no podía avanzar ni un paso.
-- ¿Bastián? – repitió el nombre del niño. Don Santiago luego de varios minutos y notar que su esposa no llegaba a donde ellos estaban, salió en su búsqueda.
El anciano encontró a su esposa pálida, de pie en el corredor, mirando hacia el vacío.
-- ¿Cariño estás bien? ¿Parece que has visto un fantasma? – le pregunta preocupado, doña Cata lo mira llena de asombro.
-- Lo vi hombre, claro que lo vi – le dice y don Santiago pone la palma de su mano sobre la frente de su mujer. Ella le manda un manotazo y la aleja.
-- ¿Qué pasa? Solo estoy revisando que no tengas fiebre... ¿Cómo puedes haber visto un fantasma, sabes muy bien que no existen? – le dice con seriedad.
Doña Cata lo mira furiosa, el problema era que no se había explicado bien y ahora su esposo estaba pensando que efectivamente había visto un fantasma, uno de verdad.
-- No es eso Santiago... yo, yo acabo de ver a un niño igualito a Sebastian. Incluso su nombre lo es – e