55.

Sirius se sintió un poco incómodo. Debía ser honesto consigo mismo: la presencia del lobo lo intimidaba. La primera vez que lo había visto, lo habían lanzado con fuerza a la celda, y el hombre estaba ahí, boca arriba, completamente desnudo, con su ropa lanzada de cualquier manera al suelo y una herida en el pecho que no dejaba de sangrar. No había tenido tiempo para ver nada, para analizar nada. Ismael le suplicó que lo ayudara y él no tuvo más opción que hacerlo. ¿Qué más podía hacer? Presionó con fuerza la herida en el pecho del lobo y esperó.

Pero ahora era diferente. Haber recuperado sus poderes lo había sanado. Y aunque se veía un poco pálido aún y le costaba caminar, no pudo evitar notar que era un hombre increíblemente atractivo. Probablemente el hombre más sexy que hubiera visto en su vida: alto y fuerte, tenía toda la apariencia de ser un poderoso Alfa, pero parecía desinteresado de todas aquellas actividades. Se veía seguro de sí mismo y, cuando le sonrió con esa sonrisa enc
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App