Marta afirmó. —Sí pienso en otras cosas: en nuestro parque de diversiones y estas hermosas luces.
Se rio y me abrazó más fuerte. —Y en ti, hermanita.
Qué amable eres.
Llegamos al área del accidente. Sergio subió con agilidad a inspeccionar, tomando notas mientras revisaba.
—Se dañaron dos grupos, cada uno con veintidós luces pequeñas de trece colores diferentes —dijo Sergio mientras examinaba en detalle los daños y miraba la grúa que trabajaba cerca.
Luego se dirigió a Marta. —Contacta al supervisor, hay que determinar responsabilidades y daños.
Marta obedeció y llamó a Alejandro, quien llegó en breve. Se sorprendió al verme.
Pareció no esperar mi presencia, pero después sonrió. —¿Sara vino a hacer una inspección anticipada?
Ya no era la encargada aquí, así que sonaba a burla.
Pero sabía que bromeaba, así que sonreí suavemente. —No, vine a ver a Sergio.
Al decir esto, noté algo momentáneo en los ojos de Alejandro antes de que mirara a Sergio. —Los contratistas ya me explicaron lo del a