Las mujeres seguían petrificados en su sitió, pero el hombre se agachó tocó el cuello de Florencia, su rostro se ensombreció aún más volvió a ponerse de pie - Olivia - la voz de Aidan era fatalmente fría, su expresión era dura, su mirada filosa. — ¿Sabes lo que acabas de hacer? - Preguntó el hombre, fue allí que Mariana y Úrsula dejaron de contener la respiración, aparentemente Aidan tenía otra perspectiva desde el pie de la escalera.— Ven aquí Olivia.
— Aidan, fue un accidente— Mariana, bajo rápidamente por las escaleras dispuesta a ayudar falsamente a su hermana.
— Por supuesto que no fue un accidente, Olivia tenía claras intenciones de empujar a Mariana, Florencia la protegió, tu esposa acaba de echarle en cara a Mariana que incluso si ella pierde un hijo, no importa, que ella tiene la posibilidad de volver a quedar embarazada, en cambio, Mariana no - Úrsula inventó aquello con suma perversidad.
— Silencio— expresó Aidan con el enojo siendo el reflejo más notorio en su rostro, entr