—¿Qué sucedió? —preguntó Eva nuevamente, la loba seguía mirando hacia el camino con los ojos fijos en el horizonte, sin escuchar con claridad nada a su alrededor.
Gale entró a la casa y corroboró que el niño ya no estaba, la sangre manchaba todos los pasillos de afuera, Maya había acabado con todos. Llamó a Eva para hablar en privado.
—Algo terrible ha ocurrido. —dijo él, mirando y olfateando la sala. Se percibía el ambiente tensionado.
—El mercenario volvió, pero no comprendo que es lo que pasó exactamente, Maya está muy mal…
Eva miró a Gale sin muchas esperanzas, creyendo que habían matado al niño y que por eso la loba había entrado en una crisis. Era lo más lógico, incluso Gale lo creía.
—Esperaremos a que llegue Seth, para que pueda hablar con ella. Es el único que puede hacer algo… A nosotros no nos hablara.
Gale miró a la condesa sin muchas esperanzas, el niño parecía haberse esfumado y no había nada que hacer.
—Debes curarte esa herida. —le dijo a ella, inspeccionándola mientra