Juan y Simón llegaron enseguida y trasladaron a Luciana al hospital.
Por fortuna las lesiones eran leves: raspones múltiples y un esguince en brazo y muñeca; no requería internación. Tras la cura y unos analgésicos orales, le dieron el alta.
Cuando Sergio apareció, traía información fresca:
—Alejandro… el agresor es el presidente del club de fans de Luisa.
—¿Qué? —Alejandro quedó atónito, como si le hubieran dado un mazazo.
Sergio tampoco lo entendía del todo.
—Ya sabes cómo es el fandom; a veces se les va la mano. Supongo que se siente indignado por Luisa.
Durante años Luisa figuró públicamente como vinculada a Alejandro y, hacía poco, los rumores sobre el “nuevo amor del señor Guzmán” se convirtieron en vox populi en Muonio.
De la noche a la mañana dejaron de circular noticias de Luisa, y en el medio artístico empezó a decirse que Alejandro la había “destronado”. Eso repercutió de inmediato en sus contratos y beneficios.
Algunos fans —más enamorados que sensatos— reaccionaron con vio