Tifani había fortalecido su autoestima gracias a todas las terapias motivacionales que recibía y a las charlas que escuchaba en la iglesia cada vez que asistía junto a Ángel.
-Sí, he mejorado mucho. Nunca me había sentido tan fuerte a como lo soy ahora.
-Qué bueno saberlo porque no estás sola. -Dije. –Pero dime ¿Qué hizo Ángel para evitar que, el azar le ganara? O mejor dicho ¿Cómo Dios lo evitó?
-Su hermana siempre le insistía en aferrarse a Dios. Le dijo que no podía obligarlo a superar su dolor ni a tener motivos para vivir; sin embargo, le recordaba que, su madre ya no estaba para ellos, pero ella si estaba para él y Dios los sostenía. Gracias al libre albedrío él podía elegir qué camino tomar y ella lo iba a dejar, confiando en que tomaría la mejor decisión y si en el peor