Mundo ficciónIniciar sesiónLa bodega en Vallecas parecía abandonada desde fuera. Ladrillo rojo desgastado, ventanas sucias, cartel oxidado que decía "Almacenamiento Industrial".
Pero Sebastián vio lo que otros no verían.
Cuatro hombres. Trajes discretos. Postura militar. Auriculares. Armas ocultas pero obvias si sabías dónde mirar.
Seguridad profesional.
—Confirma que es el lugar correcto —murmuró Javier desde asiento del conductor.
Sebastián amplió foto en su teléfono. Ventana del segundo piso. Comparó con imagen que Fontaine había enviado.







