Kiki miró su reloj en el justo momento que le notificaban que Kamil y su madre llegaban en aquel instante, le solicitaban con carácter urgente para realizar sus pedidos en el camerino.
-Yo iré a ver la sección de fotos, por suerte es el último día que tendré que soportar a esas dos berrinchudas mujeres, pero…comeré este delicioso chocolate con avellanas que me endulzará la vida logrando que las ignore cuando inicien con sus…lamentos…-.
-Hoy es un día extraño-. Dijo la señora Pelton. Mientras tomaba su recipiente con palitos de zanahoria y pepino.
-Que delicia… ¿Puede darme unos? -. Mía esperaba.
-No, son mis palitos que hizo mi querido esposo-. La señora Pelton hizo un corazón con sus manos.
Kiki tomaba un contenedor con varios accesorios. -Señora Pelton envíe el vestuario mientras reviso el camerino, llegarán en diez minutos-.
-Lo envíe hace unos minutos, no te preocupes, por suerte resolviste con éxito el lio de la tela…-.
-Fue agradable resolver el lio.-. La señora Pelton apreciaba