Fernand estaba furioso, al final, Juliette no le dijo más nada de lo que hablo con aquel infame cazador, llegando al hotel donde mantenía cautiva a la hermosa loba la llevaba casi por la fuerza, necesitaba saciar su instinto, no podía tomar a Juliette, reafirmar un dominio que aún no existía sobre ella, pero para ello, tenía a Ekatherine.
Tomando a la hermosa loba, la llevo en brazos de regreso al hotel donde se habían hospedado, necesitaba tomarla, reafirmar su dominio sobre aquella hembra a la que le estaba costando demasiado dominar, tenía una fuerza interior brutal, la había visto resistirse al vinculo de la marca en su cuello, deliberadamente lo había desobedecido para ayudarle a escapar a esos humanos asquerosos, no entendía cómo, no entendía porque, pero era realmente una proeza que pudiese hacerlo, arrojándola sobre la cama, rasgo la ropa que le había comprado haciéndola jirones sobre el suelo, exponiendo su hermosa y perfecta desnudez ante él, sentía su miembro palpitar dolo